SOCIEDAD

Docente de San Antonio de los Cobres: “enseñamos en cuarentena sin estar preparados”

Docente de San Antonio de los Cobres: “enseñamos en cuarentena sin estar preparados”

Marita Lucero enseña en la localidad de la puna salteña desde hace 23 años. “Las herramientas para trabajar las debería dar el ministerio de Educación”, asegura por los gastos que debió hacer para que sus alumnos reciban el material de trabajo diario.

La cuarentena tomó por sorpresa a muchos sectores. Muchos de ellos no estaban preparados para adaptarse y lo fueron haciendo durante el camino. El sector docente debió adaptarse casi inmediatamente y luego de dos semanas de clases presenciales debió volcarse a la virtualidad, tarea que posee sus propios códigos y herramientas para los cuales los docentes no fueron capacitados debidamente. En zonas rurales de Salta, como por ejemplo en la Puna salteña, las familias tampoco poseen los medios y recursos necesarios para cumplir con esta tarea.

“Me compré un celular nuevo para poder tener mejor señal y calidad en los materiales que enviaba a los alumnos. También es necesaria una computadora, que no todos los docentes tienen”, explica Marita Lucero a LA GACETA.

San Antonio de los Cobres es mundialmente conocido porque allí finaliza su recorrido el Tren a las Nubes. Posee cerca de 5.500 habitantes y se llega luego de un viaje de casi tres horas en auto, 165km en camino de cornisa, por la Quebrada del Toro, transitando la RN51.

Marita llegó hace 23 años y medio a la localidad de San Antonio de los Cobres. Era una noche fresca y el pueblo estaba prácticamente vacío. En el Hogar Escuela N° 4661 "Carlos Guido Spano" donde fue designada como maestra jardinera, había una habitación que pudo ocupar solo esa noche. Al día siguiente trabajó y fue a buscar un hogar para alquilar.

Al Hogar Escuela asisten aproximadamente 400 chicos que asisten allí, de los cuales menos de la mitad se quedan a dormir. Solamente ven a sus familias tres veces al año. Aunque muchos de ellos residen en el pueblo, las familias eligen que compartan en e l hogar sus días. Otros lo hacen por necesidad: sus familias viven en medio de los cerros y no es opción trasladarse a la escuela diariamente, debido a las distancias.

A partir de los años, el Hogar Escuela fue creciendo y este año cumple sus bodas de brillante: 75 años. Hace 23 años, las clasesde jardín se dictaban en el dormitorio de los niños, no había aulas. Ellos realizaban sus actividades sentados en sus camas. Luego de mucho esfuerzo y algunas rifas, pudieron comprar las primeras mesas y sillas para los pequeños. “La cantidad de chicos fue en aumento, teníamos 18 chicos en el jardín hace años. Hoy hay dos turnos de 30 chicos, son cerca de 60 en total”, cuenta Marita.

En los últimos años, los Hogares Escuelas fueron cerrando en el país. En Salta quedaron dos: el de Capital y el de San Antonio de Los Cobres. “Son escuelas que tienen la situación de chicos albergue, es decir que se quedan a dormir y comer. Solo van en cuatro oportunidades a sus casas con sus familias: en vacaciones de verano e invierno, en Pascuas y en la Festividad del Milagro en Salta”. En el último tiempo la escuela hizo mucho hincapié en que los padres mantengan una relación más estrecha con los niños. “Les pedimos que cuando vengan a cobrar al pueblo pasen a visitarlos y, si se quedan a dormir que compartan tiempo con ellos. Lo que pasa es que muchas veces vienen a la madrugada y a la tarde ya se van por los horarios de los colectivos”.

Marita Lucero, docente de San Antonio de los Cobres. IMAGEN GENTILEZA M. LUCERO.

La cuarentena en la Puna

El lunes 16 de marzo, día en que se decidió que no vuelvan los alumnos a clases, se los citó a todas las familias a una reunión en la que contamos lo que sucedía en el país y en el mundo con la pandemia del Coronavirus. “Preparamos cartillas para cada alumno, estuvimos trabajando todo el fin de semana para que ese mismo día ya se lleven actividades para realizar porque conocemos la zona. No tenemos buena conectividad ni temprano a la mañana ni a la tarde por el fuerte viento. Solamente a mitad de mañana uno se puede conectar bien”, cuenta la docente y explica que las actividades eran para los siguientes 15 días. “Todo eso sale de nuestros bolsillo, las impresiones y fotocopias”, asegura.

El motivo del por qué los docentes se hacen cargo de todos los gastos en cuarentena –y muchas veces durante el año- es simple: “hablamos de familias carenciadas que no pueden pagar nada. Nosotros conocemos la realidad de las familias, ni siquiera se nos ocurre pedirles. Cuando ellos van a cobrar algún subsidio es para comprar víveres. Ya es mucho decirles que sus hijos deben ir a su casa y deben alimentarlos cuando no cuentan con ese gasto porque se lo provee el Hogar. Ahora, por ejemplo, estamos preparando módulos alimentarios con la ración de cada chico y cada familia la está buscando. Es la ración mensual de cada alumno, eso ayuda al menos a paliar la situación de cada familia”.

Los gastos de los docentes superan a lo que ya tienen mensualmente. Un docente de área de frontera o rural, debe pagar un doble alquiler o compartir con quién vivir. Es el caso de Marita que vive en Salta los fines de semana y trabaja en la puna de lunes a viernes. Al traslado de la Puna a Salta se le incrementó el uso de teléfono con video llamadas y mensajes que van y vienen, siempre y cuando haya buena señal o sea principio de mes y las familias tengan datos disponibles. “Debemos dejar todo preparado con antemano como las cartillas en la fotocopiadora. Esos gastos que estamos teniendo la cuarentena nos pegó doble tenemos en el caso mío tuve que poner internet en Salta porque la cuarentena la estoy haciendo en Capital y necesito comunicarme con los alumnos en la puna. “Hay mamás que no saben leer ni escribir y debo buscar la forma de adaptarme a eso también para que los chicos de jardín y cuarto grado – que también tengo a cargo- puedan avanzar con sus actividades”.

La docente lleva una planilla en donde asienta las tareas que le presentan. “Cuando uno se va quedando, lo llamo”. De los 30 chicos alumnos 20 tienen buena conectividad a internet. “De esos 20 hay 8 con datos, pero no pueden gastarse todo en la escuela”.

“Esta cuarentena nos hizo enseñar de una forma en la que no estábamos preparados: la virtual. Nosotros los docentes estamos preparados para el trabajo en el aula, presencial. Creemos que las herramientas la debería dar el Ministerio de Educación de la Provincia, de quien dependemos.

Hogar Escuela N° 4661

Días atrás, el ministro de Educación de Nación, Nicolás Trotta, indicó que quizás las clases volverían en agosto. “Me gustaría conocer en qué circunstancias podremos volver porque vamos a pedir que nos den los insumos necesarios. Así como sacamos de nuestro bolsillo ahora, no podemos seguir poniendo dinero y comprar alcohol en gel, lavandina y demás herramientas. El ministerio va a tener que poner lo que corresponda”, concluyó la docente.

Fuente de la Información: La Gaceta



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