Ellas almorzaban en una confitería del centro de Salta, cuando dos hombres que las miraban y se burlaban por su identidad, las agredieron brutalmente. Las insultaron y las golpearon hasta dejarlas ensangrentadas en la vereda.
El maltrato continuó en la policía. Las mujeres trans fueron a denunciar lo que habían vivido en la comisaría segunda, en Pellegrini al 700, pero los primeros efectivos que las atendieron no quisieron registrar la denuncia.
“Me enteré de esto y me acerqué a la comisaría”, contó a LA GACETA, Pía Ceballos, directora del Observatorio de Violencia contra las Mujeres (OVcM) y activista de Mujeres Trans Argentina. Recién allí, con horas de demoras, los oficiales asentaron la denuncia.
En total fueron cinco las personas que agredieron a las mujeres trans: los dos hombres y tres mujeres que en la vereda del local se aliaron a los primeros para humillar a las víctimas. Una de las agresoras, vecina de la zona, golpeó con un palo de amasar a una de las víctimas; le partió el labio y los dientes. Los agravios, las patadas y puñetazos siguieron hasta que otra vecina salió a socorrerlas y dio aviso al 911.
“Claramente la agresión social a las personas travestis y trans sucede en un contexto provincial y regional donde hay una narrativa que abona a la violencia hacia ellas. Y las consecuencias son estas; son habituales las agresiones en la vía pública y en espacios comunes, como es una confitería”, alertó Ceballos, quien acompañó a las víctimas hasta que detuvieron a los agresores, la noche del sábado pasado.
“No hay tolerancia, hay un constante ataque de odio por prejuicios, burlas y señalamientos”, remarcó.
Por esto, y por los usuales casos de discriminación y violencia que sufren las personas trans y travestis, el OVcM manifestó su preocupación y repudio a estos actos.
COMUNICADO
— OVcM Salta (@ovcmsalta) October 30, 2019
El Directorio del OVcM expresa su preocupación por la violencia social hacia las personas travestis y trans. pic.twitter.com/kRxOmmL06u
Además, el organismo solicitó a la fiscalía a cargo de Horacio Guillermo Córdoba Mazuranic que siga la recomendación del OVcM para dar cuenta de las trayectorias de violencias que padecen en su vida las personas travestis trans, según informó Ceballos.
También se pidió a la subsecretaría de Políticas de Género del Gobierno de Salta que acompañe en la prevención de estos hechos, realizando campañas efectivas contra el bullying y la discriminación. Y se recordó a los responsables del Programa Asistencia Integral a Víctimas de Violencia la protección que necesitan las jóvenes agredidas en la confitería, quienes son trabajadores sexuales y tienen miedo de volver a la zona.
“Acá se cometió un delito penal, pero hay un imaginario social que siempre pone en tela de juicio a las personas trans y travesti, considerándolas como no sujetas a derecho”, dijo Ceballos, quien cuestionó la violencia social e institucional que hostiga a cuerpos e sexualidades disidentes en Salta.