Hay preocupación en el sector de los trabajadores por la actual situación económica del país y la medida del Gobierno nacional de pedir ayuda al Fondo Monetario Internacional (FMI) suma pesimismo.

En diálogo con El Tribuno, el dirigente del Hospital Materno Infantil e integrante de la Interhospitalaria, Justino Ustarez, aseguró que "esta es una situación muy delicada para todos los trabajadores".

"Todo esto genera angustia porque el dólar sube todos los días y las tasas de los créditos se disparan. Las tarjetas de crédito ya no se pueden pagar", advirtió Ustarez y expuso que "hay colegas nuevos que tienen créditos UVA que pasaron en un mes a pagar de 6.000 a 9.000 pesos".

"La plata no alcanza, pero si uno trabaja más por una guardia, pierde todo el extra como consecuencia del impuesto a las ganancias. Estamos en un laberinto sin salida", denunció.

El dirigente del sector de la Salud consideró que "la situación es cada vez más crítica. No es como en el 2001, que la gente se sorprendió porque no se sabía lo que iba a pasar; ahora, aunque los medios intenten taparlos, están las redes sociales que visibilizan todo lo que ocurre y todos vemos para dónde estamos yendo".

También lamentó Ustarez el acuerdo con el FMI al asegurar que "las imposiciones del organismo internacional de crédito serán despidos, ajustes de trabajadores y planes sociales y achicar el Estado". Y agregó que "las grandes víctimas de esta situación son los trabajadores no formales".

"El Gobierno nacional debe replantearse urgente el rumbo y necesitamos el protagonismo de los gobernadores para volver atrás en muchas decisiones equivocadas que se están tomando", advirtió.

Por su parte, el secretario general del Consejo Directivo Provincial de ATE Salta, Juan Arroyo, no ocultó su malestar al afirmar que "sin dudas que estamos preocupados por la situación que hoy atraviesa el país. El escenario de fragilidad económica y social puede derivar en una situación similar a la de 2001".

"Estamos al borde del abismo, ese es el sentimiento de los trabajadores que somos quienes terminamos pagando la situación de lo que pasa en el país, como ocurrió en la última crisis", lamentó Arroyo y advirtió que, por eso, "estamos en estado de alerta y movilización".

Paro en junio

El dirigente informó que "ayer (por el jueves) tuvimos un congreso en donde se votó un paro para los primeros días de junio porque no solo los empleados nacionales están perdiendo sus puestos de trabajo sino que además no se cumplieron los acuerdos de las últimas paritarias en la provincia".

Según Arroyo, "participaron 250 congresales de toda la provincia, tanto de Capital como de los departamentos y municipios del interior y todos coincidieron en la necesidad de realizar un paro provincial para los primeros días de junio para que la provincia pueda cambiar el rumbo y no seguir a Nación en las políticas que aplican".

"Además de que el porcentaje de la paritaria fue insuficiente, hay muchos puntos de la negociación que no se están cumpliendo, sobre todo en lo que tiene que ver con la salud", manifestó el titular de ATE.

Finalmente, admitió que "los asalariados estamos preocupados por la precarización laboral que viene en aumento porque además nos damos cuenta de que los ajustes del Gobierno nacional van en esa dirección".

A su turno, el secretario general de AMET, Eloy Vidal Alcalá, indicó que "nosotros lo venimos anticipando y denunciando, incluso desde el año pasado lo que iba a pasar, pero la gente no nos creyó y volvió a votar por Macri y sus candidatos".

"Hoy ya no hay forma de tapar lo que está pasando", afirmó Alcalá y consideró que "esto afecta directamente a los trabajadores. Es una cadena que termina perjudicando más al asalariado" y que "lamentablemente el Gobierno nacional no da en la tecla para solucionar el problema económico".

El dirigente gremial consideró que "este mes va a ser clave para ver si el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) sirve de algo. "Yo creo -continuó- que cada vez que hubo un gobierno que acordó con el FMI el pueblo terminó castigado".

El 15% de aumento quedó desfasado

Con una inflación proyectada por el Banco Central en el 22%, el 15% de paritarias fijado por el Gobierno nacional para los estatales y la mayoría de los privados deja a los trabajadores en una situación de una enorme pérdida de poder adquisitivo.

Eloy Vidal Alcalá dijo que “nosotros desde AMET siempre dijimos que la inflación iba a ser como la del año pasado del 25 o 26 por ciento anual y vamos hacia eso”.

“Con el acuerdo del 15% que se firmó estamos muy lejos. El Gobierno nacional nos volvió a mentir y tendremos que trabajar en agosto para recuperar el poder adquisitivo de los trabajadores”, anticipó el dirigente.

Finalmente advirtió que “todavía no llegamos ni a mitad de año y ya estamos cerca del 15% que el Gobierno nacional había proyectado para todo el año”.

Arroyo, por su parte, indicó que “ya necesitamos otro incremento porque el 15% que dieron inicialmente no alcanza y ya fue superado por la inflación”.

“Los porcentajes que recibimos están por debajo de lo que suben las tarifas de servicios y los precios de alimentos y combustibles”, se quejó.

Agregó que “nosotros no hemos adherido al 15 por ciento que otorgaron Nación y Provincia y nos pusimos como meta reunirnos a mediados de julio para hacer un análisis para ver cómo recomponíamos la situación”.

Finalmente, Ustarez explicó que “a nosotros nos dieron el 15% repartido en varias cuotas: primero un 5% que fue $700, ahora un 2,5% que son, como mucho, $400, nada que ver con las subas que hay en todas las cosas. Ni hablar de tarifas de luz y gas”.

“Necesitamos que los legisladores nacionales planteen la situación social que existe en el país, que es muy grave. La gente está muy nerviosa, esto es muy peligroso”, cerró.

Fuente: El Tribuno