Por medio del Sistema Único de Monitoreo de Agresores (Suma) se hace un seguimiento electrónico a 36 personas con denuncias por violencia familiar y de género.
El sistema utiliza tecnología para el monitoreo, control y vigilancia en los casos que la Justicia lo ordene.
Por medio de dispositivos electrónicos se constata que los agresores cumplan con la orden de no acercarse a las víctimas.
La secretaria de Justicia y Métodos Participativos de Resolución de Conflictos, Carina Iradi, expuso ante referentes del Poder Judicial sobre el funcionamiento de Suma.
La funcionaria mostró a los magistrados y funcionarios los resultados del programa, que se aplica para resguardar a la víctima con sistemas de advertencias y actuación policial.
"Nos reunimos con magistrados porque son ellos los que toman las medidas; con este intercambio buscamos optimizar el camino de los oficios y precisar algunos detalles que hacen que este servicio sea posible", indicó Iradi.
La funcionaria recordó que el Suma permite un control eficiente del cumplimiento de las medidas preventivas dictadas por la Justicia.
El agresor es monitoreado para evitar situaciones de riesgo y la violación de la restricción de acercamiento. Cuando ingresa a una zona considerada de advertencia respecto de la ubicación de la víctima, se activan las actuaciones policiales.