Un relevamiento realizado en el norte de Salta revela las condiciones en las que vive la población trans, las experiencias de discriminación y su autopercepción. Entre los datos revelados, se supo que la mayoría manifiesta su identidad de género antes de los 15 años de edad, lo que advierte la necesidad de tratar este tema en la escuela y la urgencia de implementar la educación sexual integral.
Así lo advirtieron las directoras del Observatorio de Violencia contra la Mujer de la provincia, organismo que realizó este estudio junto a la Universidad Nacional de Salta (UNSa), durante este año.
Para ello se encuestaron a 54 personas del departamento San Martín, con una edad promedio de 30 años, que se autoidentificaron con el género trans; aunque las identidades son más amplias que dicha categoría, considerando que hubo una minoría que manifestó autopercibirse transexual, transformista, maricona, intersex o intesexual, por ejemplo.
En cuanto a la edad de expresión social de las identidades de género, el 56% de las personas encuestadas (la mayoría) declaró que fue antes de los 15 años de edad. “Esto pone un alerta en las escuelas secundarias, por ejemplo, para que no sean expulsoras sino inclusivas de estas nuevas manifestaciones”, dijo Alfonsina Morales, integrante del directorio del Observatorio, durante la presentación del informe anual de este órgano.
Además, se pudo saber que la mayoría de los encuestados (30,9%) no terminaron el secundario o polimodal y en la actualidad evidenciaron una situación laboral precaria, sin ningún tipo de cobertura de salud. En este sentido, 32 de las 54 personas encuestadas dijeron estar o haber estado en la prostitución, a la vez que 23 de ellas manifestaron que buscan una alternativa laboral diferentes.
“Los datos de ocupación muestran una situación laboral sumamente precaria y de elevada informalidad”, alertó Morales, quien además detalló el grado de discriminación que siente la población trans en Salta.
El 66% de los consultados se sintieron discriminados a lo largo de su vida por su identidad de género. En relación a los tipos de agresiones vividas, las burlas son una de las agresiones que afectaron a casi la totalidad (45) y los insultos y amenazas otras de las respuestas más frecuentes (41). Luego le siguen el acoso sexual (26) y los asaltos por un “levante” o un cliente (25).
En cuanto a los ámbitos públicos en los que sintieron discriminación, advirtieron que, en el espacio religioso, la vía pública y la comisaría fueron los sitios donde mayormente así lo vivenciaron. Pero llamativamente gran parte de los encuestados confesaron no conocer sus derechos.
"Ante la pregunta de si conocen las leyes que los protegen, la mayoría plantea no conocerla o que no fueron capacitadas sobre la ley de identidad de género. Son cuestiones que nos dan a entender que aún hay mucho para trabajar en sensibilización, prevención y difusión de las leyes existentes, porque este año ha sido importante la batalla que hubo en intentar retroceder y quitar derechos ya adquiridos", resaltó Morales, en referencia al resurgimiento de movimientos sociales y políticos que cuestionan leyes vigentes como el matrimonio igualitario y la educación sexual integral.