La falta de previsión sobre la inflación no solo golpea los hogares sino también a las instituciones. Esta parece ser la situación que está atravesando el PAMI, a la hora de armar los bolsones alimentarios para los jubilados que perciben el haber mínimo de 8.096 pesos.
Ayer, la denuncia de los Centros de Jubilados de ATE circuló en distintos medios. Se dio a conocer que el bolsón que incluía 19 artículos quedó reducido a solo 10.
Desde la obra social de los jubilados no respondieron sobre el tema, pese a que El Tribuno intentó por distintos medios solicitar la información.
Desde el Movimiento de Jubilados Salta, Juana Magione explicó las razones por las que, al menos en el centro de jubilados que ella dirige en Rivadavia al 1200, vio reducido el número de productos de la canasta de alimentos para los 500 afiliados.
En diálogo con este medio, Juana Magione indicó que los centros de jubilados reciben todos los meses una partida de dinero para pagar a los proveedores de la mercadería. Hace varios meses que la canasta, que a principios de año contaba con 19 productos, comenzó a reducirse. Ocurrió luego de que los proveedores se reunieran con las autoridades del PAMI y advirtieran que no podrían mantener los precios anteriormente pactados.
Frente a esta situación, desde la obra social de los jubilados se reunieron con los delegados de cada uno de los centros de la provincia y les confirmaron que "no estaba previsto dentro del presupuesto un aumento en los precios de los alimentos como el que se dio, por lo que no se cuenta con dinero para pagar el incremento que reclaman los proveedores".
"Engañar el estómago"
"Así fue que las nutricionistas del PAMI comenzaron a ver cuáles eran los productos que no se requerían. Este mes sacaron la yerba y la harina", destacó Juana, a lo que agregó que el retiro de la harina es una gran pérdida para sus pares. "Muchos hacían pan o fideos caseros con la harina, ahora ya no la tienen. Y la yerba servía para engañar el estómago cuando se está con hambre", expresó la mujer.
El bolsón que se entregó la semana pasada tiene 10 productos: un aceite, un kilo de azúcar, un kilo de arroz, medio kilo de fideos, un paquete de sémola de medio kilo, una leche en polvo de un kilo, un paquete de galletas de agua, una mermelada, una caja de té de 25 sobres y un puré de tomate.
Del bolsón original eliminaron yerba, harina, atún o corned beef, arvejas en lata, postre en polvo, avena y lentejas.
Juana Magione destacó que las necesidades de los jubilados son cada vez mayores, ya que todos los días llegan abuelos a averiguar qué deben hacer para recibir el bolsón.
La mujer a cargo del Centro de Jubilados detalló que el pedido debe realizarse en las oficinas del PAMI, ubicadas en Zuviría 20.
Allí se lleva adelante la inscripción y solo se permite el ingreso de un nuevo beneficiario cuando se genera un deceso o alguien deja de buscar el bolsón.
Números que asustan
En la actualidad la jubilación mínima es de $8.096. Según relevamiento realizado en agosto por el Sindicato de Farmacéuticos y Bioquímicos (Safyb), los jubilados que sufren enfermedades prevalentes en la tercera edad pueden destinar hasta un 43% de una jubilación mínima para esos fármacos. Un jubilado que tenga distintas patologías puede gastar hasta 3.532 pesos en remedios. Siguiendo estos números, un jubilado solo cuenta con 4.564 pesos para subsistir durante el mes. Lo que implica que solo pueden realizar un gasto de 152 pesos por día.
Dieta en la tercera edad
El paso de los años hace necesario repensar los alimentos que se consumen. Algunos, en particular los productos frescos como carnes, frutas, verduras y lácteos, son fundamentales.
Carla Sánchez, licenciada en Nutrición, destacó que en la tercera edad la alimentación debe ser completa y equilibrada. Consultada sobre los productos que trae el bolsón que se entrega a los jubilados, Sánchez consideró que para un jubilado sin patologías no habría problemas. “Un diabético tiene otro tipo de requerimientos”, expresó.
La licenciada afirmó que el aporte de alimentos con proteínas es muy importante, ya que se atraviesa una etapa degenerativa de masa muscular.
El bolsón actual de los jubilados no los incluye.