Cuando sonó el teléfono, Viviana Contreras pensó que la llamaban de algún medio para una nueva entrevista. Desde que salvó a Mateo, un bebé de 8 meses, en pleno viaje del colectivo que manejaba una noche de viernes, el teléfono no para de sonar. Pero esta vez no era un periodista de Córdoba, Tierra del Fuego ni de algún diario nacional. Era el Presidente de la Nación.
"Cuando vi el número de Buenos Aires pensé que era por una entrevista porque estaba esperando un llamado por la tarde. Así que estaba convencida de que era eso. Respondí normal. El que hablaba comenzó diciéndome que se comunicaba para felicitarme y decirme que era un orgullo que haya actuado así", contó la chofer de la línea 2G.
Pasaron algunos minutos, y esa voz aún desconocida le preguntó el nombre de su hijo, que en ese momento descansaba en el brazo libre de su madre. "Yo todavía no me daba cuenta de quién era", dice.
Nadie le había avisado que la llamaría el Presidente a Viviana, que trabaja de chofer pero le faltan seis meses para ser enfermera. "¿Vos no sabés con quién estás hablando, no?", le dijo Macri y, con naturalidad, ella le contestó: "La verdad que no". "Acá te saluda Mauricio Macri", le respondieron del otro lado.
En ese momento Viviana corrió a despertar a su marido y le contó que tenía al Presidente en el teléfono. Aún somnoliento, pero ya un poco acostumbrado a lo inesperado, su esposo atinó a grabar la conversación.
"Tengo la prueba de que me llamó", lanza Viviana divertida mientras conduce. La joven de 23 años no dejó de trabajar, aunque sus días hayan cambiado desde que trascendió su historia. Ahora la reconocen en la calle y los pasajeros la tratan como a una estrella de rock.
El viernes 2 de marzo, Viviana conducía su colectivo cuando se acercó a ella una madre desesperada porque su bebé había dejado de respirar. En segundos, la chofer detuvo el ómnibus y logró reanimarlo. Luego siguió manejando hasta la clínica más cercana, donde terminaron de estabilizar al niño de ocho meses.
La chofer contó que actuó con seguridad porque estuvo muy cerca de recibirse de enfermera. Aunque debió dejar la carrera, trabajar en la salud es su verdadera vocación.
"No nos podemos perder a una enfermera como vos. Prefiero que se pierdan una conductora como vos que a una enfermera como vos", le dijo el Presidente, que también la alentó a no abandonar su sueño. "Sí, a veces es necesaria una ayuda", contestó la conductora.
Viviana contó ayer que desde el Instituto Ramón Carrillo, donde estudió, la contactaron con la promesa de volver a llamarla. Está contenta y su sonrisa es constante al compartir todo lo que está viviendo.
"Lo que soy se lo debo a mis padres", dijo con humildad ayer, antes de comenzar su recorrido.
"Algunas mujeres me dicen que me esperan bajo el sol porque quieren que yo las lleve. Dicen que se sienten más seguras conmigo", relató.
Las felicitaciones ayer también llegaron de sus jefes. El dueño de la empresa en la que trabaja, El Cóndor, la llamó para alentarla.
"Espero enterarme pronto que retomaste los estudios. Aquí también vamos a empujar", expresó Macri, antes de colgar el teléfono para continuar con su ajetreada agenda de presidente. Del otro lado, quedó una joven dispuesta a trabajar y a seguir estudiando y que está segura de que "todo esfuerzo tiene su recompensa".
Fuente: El Tribuno Salta