La semana que viene podría tratarse en la Cámara de Diputados el proyecto de ley por el cual los integrantes de la Orquesta Sinfónica de Salta pasarían a ser empleados de la planta permanente de la Provincia. Los músicos hasta ahora tienen contratos que se renuevan cada tres años, tras un examen, y piden estabilidad. Legisladores consideran que el reclamo es legítimo pero quieren buscar la forma de seguir garantizando la calidad artística de la institución.

Consultado por El Tribuno, el secretario de Cultura de Salta, Sergio Mariano Bravo, afirmó que son los diputados y senadores los que deben debatir el tema, y que esperarán a que haya una definición.

"Lo prudente es respetar la instancia legislativa en la que estamos ahora, no emitir ninguna opinión y dejar que los legisladores hagan su trabajo", sostuvo Bravo.

Eugenio Tiburcio, clarinetista y delegado de la orquesta, destacó que los músicos dan muestras permanentes de su capacitación y que eso no cambiará si acceden a la estabilidad que tienen los demás empleados estatales.

"Cada tres años tenemos que revalidar nuestro cargo. En mi caso, entré en 2004. Con otros compañeros, hemos revalidado en 5 o 6 oportunidades, lo cual es muestra de idoneidad en la profesión", afirmó Tiburcio.

El clarinetista sostuvo que algunos músicos han dejado la orquesta para buscar la estabilidad laboral. "Que el equipo recambie constantemente genera consecuencias negativas en la sonoridad", dijo.

Emilio Lépez, que toca el oboe, destacó que la mayoría de las orquestas tienen a sus integrantes planta permanente. "Estamos en la vidriera todo el tiempo por la dinámica de nuestra labor. Rendimos un examen en cada concierto. Está a la vista que la calidad artística ha sido siempre muy alta y eso no tiene que ver con condicionamientos laborales", indicó.

Para el oboísta, tener un contrato que debe renovarse cada tres años "hace que los trabajadores de la cultura se vean afectados" en su derecho a la estabilidad laboral.

Redacción

Guillermo Martinelli, diputado de la comisión de Legislación General, resaltó que están buscando la mejor forma de redactar el proyecto para garantizar que los músicos mantengan su nivel de formación si pasan a ser parte de la planta permanente del Gobierno de la Provincia.

"La situación es complicada. Los músicos consideran que sus derechos como trabajadores son los mismos que los de cualquier empleado en relación de dependencia del Estado y que debieran estar en planta permanente. Lo que hay que preservar y no perder de vista es que debemos seguir teniendo una orquesta de importancia reconocida a nivel nacional e internacional", afirmó Martinelli.

"Si un músico deja de demostrar la calidad necesaria tendrá que tener un espacio en otro lugar del Estado. Eso hace a la calidad de la orquesta y es algo que el director deberá valorar. Tendrá que haber una evaluación al solo efecto de considerar si su idoneidad sigue ameritando que permanezca", señaló Martinelli.

En el mismo sentido se manifestó el diputado Julio Moreno, integrante de la comisión de Hacienda y Presupuesto. "Está bien darles cierta estabilidad a los integrantes, pero hay que cuidar muchísimo que se mantenga la calidad de la Orquesta Sinfónica", planteó.

Cornejo aseguró que los músicos podrían tener un régimen como el de los docentes, que periódicamente deben demostrar si se están actualizando pero están en la planta estatal.

La Orquesta Sinfónica,creada por Ley 7072, está integrada por 90 músicos actualmente.

“Evaluación anual de desempeño”

El proyecto de ley que se incluyó en el acta de labor parlamentaria este martes pero no llegó a tratarse en la Cámara de Diputados dice que los músicos de la Orquesta Sinfónica de Salta deberían “rendir una evaluación anual de desempeño para velar por la calidad artística”.

El texto no es definitivo y aún se desconoce con qué modificaciones podría llegar la semana que viene al recinto si se logra el consenso para tratarlo.

La iniciativa establece que los integrantes del cuerpo podrán encuadrarse en la modalidad de “músico estable”, para lo cual deberán rendir “un concurso de antecedentes y oposición ante un jurado especial, de acuerdo a las condiciones y procedimientos que establezca el Instituto de Música y Danza de la provincia de Salta”.

El clarinetista Eugenio Tiburcio y el oboísta Emilio Lépez destacaron que tienen unas tres presentaciones por mes, un promedio elevado con respecto a otras orquestas, y que cada concierto demanda estudio y trabajo.

Señalaron que la estabilidad laboral es un derecho garantizado por la Constitución Nacional Argentina y agradecieron el apoyo que recibieron por parte de músicos y artistas del país y del exterior.

“Empecé a tocar el clarinete a los 9 años y rendí para la orquesta sinfónica a los 23”, contó Eugenio Tiburcio.

El clarinetista apuntó que los integrantes de la orquesta llegaron a Salta desde distintas provincias y países, lo que implicó “una revolución educativa” para la provincia, ya que muchos enseñan en agrupaciones infantiles y juveniles.

“Es una orquesta muy dúctil, que no solo se ocupa del repertorio sinfónico sino que también abarca distintos géneros de la música popular, como el rock”, indicó Emilio Lépez.