Los problemas para la Iglesia Católica en la provincia siguen expandiéndose. A las denuncias por abuso sexual que salpicaron a varios reconocidos sacerdotes, se sumó ahora una nueva acusación. Esta vez, se denunció por acoso al cura Fernando Zannier.
La Congregación Canónigos Regulares de Letrán que fundó el Colegio Belgrano, y a la que pertenece el sacerdote, difundió un comunicado luego de que el caso se hiciera público. Indicaron que el sacerdote renunció a la parroquia Medalla Milagrosa de Tres Cerritos donde oficiaba misa.
La Congregación Lateranense depende directamente del Vaticano, por lo que se indicó que el cura denunciado solicitó a la Curia General en Roma, licencia de su cargo de visitador de la provincia lateranense de Argentina.
El comunicado, además, señaló que ya están en aviso las autoridades eclesiásticas locales y finaliza pidiendo perdón "por el daño causado" por uno de sus miembros y deja en claro que Zannier queda a disposición de la Justicia y a la espera de la resolución.
Los Canónigos Regulares de Letrán es una de las congregaciones más antiguas de la Iglesia y sus miembros se dedican al culto litúrgico solemne, al ministerio pastoral en parroquias y escuelas.
La denuncia
El hecho denunciado se indica que habría ocurrido en vísperas de Navidad. La denuncia fue radicada ante la Fiscalía Penal N§ 3 el pasado 26 de diciembre aunque recién tomó estado público en los últimos días.
Según contó la mujer, conoce al sacerdote Zannier porque fue quien la casó, y con quien retomó contacto al convocarlo para que le diera la extremaunción a su abuela, que padecía una grave enfermedad. Desde ese momento, habrían mantenido contacto a través de WhatsApp. La mujer indicó que se encontraba en una difícil situación no solo por la muerte de su abuela, sino también por estar atravesando una crisis de pareja con una inminente separación, contexto de vulnerabilidad que el cura habría aprovechado para volverse una suerte de confidente.
El momento en que asegura la mujer se quedó atónita, fue en vísperas de Navidad, al recibir mensajes de parte del religioso: "Te llego a ver y te parto la boca"; "Mostrame algo, sos muy bonita"; "Estás tan caliente como yo"; "Desde el primer momento me movilizaste"; "Poné una foto tuya cuerpo entero"; "Soy cura, soy varón", son algunos de los mensajes que habría recibido la mujer y que derivó a la Justicia como prueba. También adjuntó fotografías que habrían sido enviadas por el religioso.
Según cuenta la denunciante, no contestó los mensajes y Zannier le pidió que no hiciera público el tema para cuidar a la institución. "No solo me reventás a mí, que no sería el mayor problema, sino a la Iglesia", le habría dicho.