Emanuel Molina, que trabaja por las noches como repartidor para la empresa Glovo, comentó que su labor durante este tiempo de cuarentena se volvió esencial. En su bicicleta transporta cualquier mercadería para evitar que las personas salgan de sus casas.
En diálogo con LA GACETA, Emanuel contó que cuando el aislamiento social comenzó las ventas fueron elevadas porque muchos de sus compañeros decidieron no seguir trabajando por miedo a la enfermedad o preferían hacerlo con menor frecuencia.
“Al principio a mí también me agarro miedo porque estaba con una incertidumbre de que si había o no infectados por como leía noticias que repatriaban a muchos que se habían quedado afuera. Pero ahora me siento más tranquilo por cómo es la situación en Salta”, agregó el repartidor.
¿Cómo se trabaja?
Desde que comenzó la situación de emergencia algunos locales de comida trabajan solo con modalidad delivery. Emanuel detalló que está tomando todas las medidas sanitarias necesarias como el lavado de mano, el uso de barbijos o tapa boca porque al exponerse con los clientes y locales tiene que ser muy precavido.
Finalmente expresó que al poder ser jefe de su propio horario puede salir cuando se sienta más cómodo, por eso trabaja por las noches. “Esta es mi única fuente de trabajo, antes que todo comience yo completaba las 10 horas por día que te deja la aplicación pero ahora solo salgo unas horas".