En las puertas de la catedral Juan Silisque, vendedor ambulante, amenazó con suicidarse en ingreso a la Catedral Basílica de Salta. Quería ser recibido por la intendenta Bettina Romero o el gobernador Gustavo Sáenz. Dijo que tomó esta medida por el secuestro de su mercadería valuada en $40.000 y dinero en efectivo que rondaba en $50.000.
“Hay una persecución contra mí, esto me sucedió la semana pasada porque Control Municipal llegó y me secuestró lo que vendía, además de $50.000 que tenía en una caja para comprar lo que comerciaba”, dijo Silisque a LA GACETA.
El vendedor ambulante sostuvo que hay persecución personal y discriminación por parte de Control Municipalidad: “Es la tercera vez que me pasa porque nunca me dejé coimear. Yo veo como personal de la municipalidad recibe plata de otros vendedores para que no sean molestados, son cinco o seis inspectores que veo que realizan esa maniobra”.
Foto: LA GACETA
Cumplió con parte de la amenaza, se roció combustible
Minutos después del diálogo entre Juan Silisque con LA GACETA, el hombre cumplió con su amenaza y se dispersó nafta por su cuerpo. Personal policial, presente en el lugar, actuó de inmediato y lo detuvieron.