InformateSalta dialogó con Maximiliano Witte, dueño de la Casona del Molino, quien contó que el viernes reabrieron al público tras cumplir con todas las normas de seguridad, la poda y extracción de árboles añejos que permanecían en la casa.
“Nos fue relativamente bien, no como esperábamos, pero teniendo en cuenta que estuvimos cerrados 10 días, mucha gente desconoce que reabrimos. Tampoco nos acompañó el clima, llovió la noche del sábado y anoche, nos influye porque hay varios sectores abiertos”, dijo el empresario gastronómico.
Witte sostuvo que lo plazos burocráticos “fueron largos para lo que esperábamos, tenemos empleados, compromisos con clientes, reservas, proveedores, mercadería que se vence, por eso necesitábamos abrir lo antes posible”.
Sobre la situación de seguridad, indicó a InformateSalta que tras el accidente provocado por la caída de la rama, presentaron “un certificado del estado de la casa en general, realizado por un ingeniero, de los árboles en general y de la poda que habíamos hecho y la extracción de los árboles. Estábamos esperando la resolución, la jueza nos contestó que iban a realizar una inspección conjunta de todas las áreas de la municipalidad, pero estaba programada para mañana martes, por eso pedimos que por favor agilizaran la revisación, las áreas dieron el visto bueno y el viernes se levantó la clausura”.
El hombre recordó que la Casona siempre estuvo habilitada pero la clausura fue temporal por la situación de los árboles. “Sacamos una higuera de la época de la casa, de 200 años, estaba podada pero por precaución me pidieron que la saque y un sereno que ya estaba podado y según los inspectores no revestía peligros pero nos pidieron que lo saquemos. Nosotros nunca tuvimos ninguna observación ni clausura en los 18 años que estamos a cargo”.
Witte criticó que en los estudios de seguridad para las habilitaciones no está contemplado el estado de los árboles, por lo tanto, no prevé que los inspectores los revisen.
